La mujer campesina en la República Democrática del Congo (RDC) no disfruta de los mismos derechos que los hombres. El acceso por parte de las mujeres a los recursos productivos es prácticamente inexistente lo que conlleva a la práctica de una agricultura de subsistencia, sin acceso a la propiedad de la tierra y al crédito agrario para desarrollar sus actividades. Además, las elevadas tasas de analfabetismo suponen un impedimento para el desarrollo de la mujer dentro de la sociedad.
Uno de los retos que planteamos para este año en la zona es el de continuar las labores de refuerzo de las capacidades de las mujeres campesinas para mejorar su profesionalidad. Un elemento clave para su desarrollo personal y profesional es el acceso a los recursos productivos en condiciones igualitarias y conseguir que tengan el reconocimiento como actores legales de pleno derecho. A nivel político, sigue siendo imprescindible fortalecer las acciones de comunicación, denuncia y apoyo a las mujeres en todos los estamentos (local, regional y nacional) y fortalecer su papel como actores clave dentro del marco de la soberanía alimentaria.
En VSF apostamos por aquellas organizaciones de carácter feminista que luchan para reforzar el papel de la mujer campesina dentro de la sociedad congolesa. Un apoyo que se extiende a todas las organizaciones de base que forman parte de LOFEPACO -Liga de las mujeres campesinas del Congo- en la ciudad de Butembo, República Democrática del Congo como beneficiarias directas del proyecto. En este sentido, a principios de este mes hemos participado en unas jornadas cuyo objetivo era la mejora institucional de LOFEPACO.
Un taller de formación desarrollado con una metodología participativa ha servido de base para presentar el marco de la soberanía alimentaria: definición, historia, relación con las acciones de género y los derechos humanos, así como las principales diferencias entre soberanía alimentaria y seguridad alimentaria. El segundo módulo de formación ha tenido como objetivo ofrecer herramientas para mejorar la gestión institucional y reforzar las capacidades internas de la propia LOFEPACO. También se han hecho presentaciones específicas relacionadas con la planificación y la gestión contable. En ambos talleres han participado unas cuarenta personas y la presencia de mujeres ha sido aproximadamente del 60%.
Uno de los principales aprendizajes por parte de las participantes ha sido el acercamiento al modelo alternativo defendido por la soberanía alimentaria en contraposición al modelo dominante. El debate se ha centrado en cómo fomentar la participación en la toma de decisión de políticas públicas, defender los recursos naturales, reforzar la posición de mujer dentro del movimiento y establecer alianzas estratégicas. Por otro lado, tras un análisis interno de la asociación se ha puesto de manifiesto la necesidad de reforzar el plan de comunicación entre los distintos departamentos y organizaciones campesinas de base y relacionar sus acciones con sus documentos estratégicos. La formación continua y la capacitación de sus miembros se trabajará a lo largo de todo el año y será un eje a desarrollar a medio y a largo plazo.
Fuente: VSF Justicia Alimentaria Global