Fuente: Fundación Fontilles
València, 27 de mayo de 2020.La fundación Fontilles, organización española sin ánimo de lucro referente en la lucha contra la lepra y otras enfermedades olvidadas, ha iniciado un proyecto de cooperación sanitaria en el estado de Amazonas de Brasil para prevenir el contagio de la COVID-19. La iniciativa, que se desarrolla en torno al río Madeira, pretende evitar infecciones del coronavirus SARS-CoV-2 en los pueblos indígenas y ribereños mediante la distribución de mascarillas.
Brasil ha registrado 24.500 muertes como consecuencia de la enfermedad, y el estado de Amazonas tiene una de las tasas de infección más altas. Sus zonas rurales, poco accesibles y con recursos sanitarios mínimos, concentran la población indígena más grande del país, compuesta en esta área por 120.000 personas de 66 grupos étnicos. “Experiencias pasadas muestran que las enfermedades infecciosas introducidas en los grupos indígenas tienden a propagarse rápidamente hasta llegar a una gran parte de estas poblaciones”, explica Eduardo de Miguel, coordinador de Proyectos de Cooperación de Fontilles, quien describe el sistema de salud de estas zonas como “precario y con pocos fondos”.
Además, la vulnerabilidad social de la población indígena dificulta su acceso a mascarillas, y el colapso de los hospitales de Manaos, la capital del estado, impide el traslado fluvial de pacientes, por lo que “en estas poblaciones alejadas, la entrada y diseminación rápida del virus puede tener consecuencias devastadoras y dejaría a su población totalmente indefensa y sin capacidad de abastecerse de recursos para protegerse o tratar a las personas contagiadas”, afirma De Miguel.
Por ello, con laFundación Alfredo da Matta, la ONG ITEPES y la Fundación FAM como socios locales, el proyecto de Fontillesconsiste en la producción de mascarillas de tela lavables en Manaos por parte de un grupo de mujeres que colabora en la realización de utensilios adaptados para su uso por enfermos de lepra con discapacidades. Las mascarillas se distribuyen posteriormente entre personas nativas que vuelven a aldeas, mujeres embarazadas, personas mayores o con patologías previas, personal sanitario y familiares que salen de la comunidad por motivos justificados o personas que entran en contacto con otras personas y material foráneo.
La iniciativa se está desarrollando en el área de Rio Negro y Rio Madeira Alto, con una población aproximada de 30.000 personas, entre los pueblos indígenas de Laranjal y Kwata, en Terra Indígena Coata-Laranjal.
La fundación Fontilles
La fundación Fontilles es la entidad española referente en la lucha contra la lepra desde la apertura en 1909 del sanatorio San Francisco de Borja en el municipio de la Vall de Laguar (comarca de la Marina Alta, Alicante), en el que a lo largo de su historia recibieron atención 3.000 pacientes. Además, desde 1986 desarrolla proyectos de cooperación internacional con el objetivo de acabar con la lepra y sus consecuencias, especialmente en niños y niñas, así como con el resto de enfermedades olvidadas ligadas a la pobreza, y apoyar el desarrollo sostenible de las poblaciones afectadas.
Las diferentes iniciativas internacionales de la entidad ayudan a combatir la lepra, la filariasis linfática, la leishmaniasis cutánea, la malaria y otras enfermedades ligadas a la pobreza en nueve países de Asia (India y Nepal), África (Mozambique y Etiopía) y América Latina (Bolivia, Argentina, Brasil, Nicaragua y Honduras).
En España, la entidad desarrolla su actividad en el complejo sociosanitario San Francisco de Borja, evolución del antiguo sanatorio, en el que dispone del Hospital Ferris, centro hospitalario de media y larga estancia; del centro geriátrico Borja, especializado en la atención de personas mayores con algún grado de dependencia; y del propio sanatorio, centro nacional de referencia en lepra, que acoge residentes con secuelas de la enfermedad y da tratamiento ambulatorio en colaboración con la Conselleria de Sanidad Universal y Salud Pública. En todas las instalaciones se han extremado las medidas de seguridad e higiene con motivo de la pandemia de la COVID-19 y se han implementado los protocolos establecidos por las administraciones.