Fuente: Farmamundi
Los campamentos de refugiados saharauis se han visto gravemente afectados por las lluvias torrenciales que del 17 al 26 de octubre anegaron la zona. Y la situación socio-sanitaria podría agravarse ante el anuncio de más lluvias para los próximos días y la amenaza que esto supone sobre las reservas de alimentos y medicamentos. Farmamundi, a través de su Fondo de Emergencias y del apoyo de la Xunta de Galicia, proveerá a la Media Luna Roja Saharaui de alimentos y artículos de primera necesidad a la población afectada, durante el próximo mes.
Las fuertes precipitaciones de las últimas semanas en el Sahara han supuesto daños materiales en tiendas y casas particulares, además de en edificios, servicios sociales e instituciones educativas de los campos de refugiados saharauis. Más de 90.000 personas se han visto afectadas, 25.000 de las cuales han perdido sus hogares y se han quedado sin alimentos, según ha denunciado la Agencia de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR), que ha hecho un llamamiento solicitando ayuda internacional de emergencia a la comunidad internacional para asistir la población.
En este sentido, la intervención con la Media Luna Roja Saharaui que inicia ahora Farmamundi a través de su Fondo de Emergencias y del apoyo de la Xunta de Galicia es la respuesta a este llamado, que se centra en los campamentos más afectados, llamados wilayas, concretamente en Dajla y Auserd. “Durante el próximo mes de noviembre se entregarán varios paquetes nutricionales y artículos de primera necesidad a más de 1.000 personas, priorizando a aquellas familias con mujeres lactantes y/o embarazadas y niñas y niños menores de 5 años”, ha detallado la responsable de Acción Humanitaria y Emergencias de Farmamundi, Tania Montesinos.
Dependientes de la ayuda internacional
Casas, lugares de trabajo, tiendas, guarderías, escuelas, hospitales… En los últimos 25 años los campamentos de refugiados han levantado con gran esfuerzo servicios con los que poder normalizar su ya complicada realidad. Este ha sido posible gracias a la ayuda en gran medida de la Oficina Humanitaria de la Comunidad Europea (ECHO), el gobierno argelino, el Programa Mundial de Alimentos y el ACNUR, así como de diversas organizaciones no gubernamentales europeas y de fuentes bilaterales.
Ahora, todas esas instalaciones están en su mayoría anegadas por el agua, agravando la difícil situación socio-sanitaria que atraviesa la población, debido a que en los últimos años los niveles de nutrición, higiene y atención médica se han ido deteriorando progresivamente. “La desnutrición y las enfermedades están aumentando entre los niños, y la calidad del agua potable es precaria”, recuerda Montesinos.
La presente propuesta se alinea con la estrategia de actuación de los entes locales e internacionales presentes en el Área (ACNUR, PAM, UNICEF, CRA (Argelia), OXFAM, CISP y la propia MLRS- Delegación Saharaui para España) en el marco de las reuniones de planificación, coordinación y respuesta que tuvieron lugar desde el momento de las primeras lluvias, el 17 de octubre de 2015.