Fuente: ASOL
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Desde nuestra asociación Amanecer Solidario (ASOL), al principio del estado de alarma sanitaria, hicimos una reflexión sobre las circunstancias del confinamiento girando la mirada hacia El Salvador y solidarizándonos con los que ya se encontraban en situación de vulnerabilidad.
Con el inicio de junio, el paso de la tormenta tropical «Amanda» ha azotado duramente a El Salvador dejando muertos, desaparecidos y miles de damnificados. Son duras las imágenes y noticias que nos llegan de las comunidades que ASOL acompaña.
El reto ahora es mayor, la sombra de desesperanza campa sobre familias y comunidades empobrecidas; los logros en derechos de la mujer y la niñez se ven amenazados; la prevención de enfermedades y la atención en salud resulta apremiante y el daño ambiental de la tormenta, merma la generación de recursos económicos, materiales para la sostenibilidad.
De la misma manera que aumentan las dificultades, aumenta el compromiso y el llamado solidario a todos los agentes sociales, económicos, políticos, culturales y religiosos. Nuestro pequeño país centroamericano nos demanda cercanía y proximidad.
Reiteramos estas palabras: El Salvador está a las puertas de la mayor tragedia social jamás vivida en dos siglos de historia, el efecto económico se presiente realmente dramático, pero se debe priorizar la vida y los valores de coraje que tanto han caracterizado al pueblo salvadoreño cuando se ha enfrentado a un terremoto, a un huracán, a una sequía o incluso a una guerra civil.
Desde ASOL no damos por perdidos los pasos dados. Seguiremos nuestro esfuerzo por revertir este drama, en un camino de esperanza y dignidad.
Si queréis realizar alguna aportación podéis realizarla al número de cuenta de ASOL.
N.º de cuenta bancaria: ES78 2100 5395 4902 0010 0407
Dicha aportación la haremos llegar íntegramente a nuestra Asociación hermana Nuevo Amanecer de El Salvador (ANADES).
¡Muchas gracias por vuestra solidaridad!
