Fuente: Caritas
Pocas horas después del impacto del tsunami que el pasado 23 de diciembre asoló las costas de las islas de Sumatra y Java ribereñas al Estrecho de Sonda, equipos de voluntarios de las diócesis de Bogor y Tanjung Karang, a las que perteneces las zonas siniestradas, pusieron un marcha un plan de emergencia para auxiliar a los damnificados.
Según el primer informe de situación facilitado ayer por Cáritas Indonesia (Karina), el total de víctimas, hasta el 24 de diciembre, es de 373 personas muertas, 1.459 heridas, 128 desaparecidas y 5.665 desplazadas. Además, cerca de 681 casas están seriamente dañadas y 69 hoteles han sufrido graves daños, así como otros muchos edificios. Las pérdidas materiales son cuantiosas.
Los Gobiernos locales están trabajando mano a mano con el ejército, la policía y el Gobierno central para evacuar tantos damnificados como sea posible y proporcionar asistencia directa a los sobrevivientes. Los heridos están recibiendo tratamiento médico en las clínicas y hospitales de la zona.
El tsunami golpeó con mayor intensidad las provincias de Banten, en el extremo occidental de Java, y Lampung, al sur de Sumatra. La primera de estas provincias forma parte de la Diócesis de Bogor y la segunda de la Diócesis de Tanjung Karang. La zona donde se concentra mayor saldo de vidas humanas es el distrito de Pandeglang, en la provincia de Bantan.
Reparto de alimentos y ayuda básica
En Lampung, el mismo 23 de diciembre, la Cáritas de Tanjung Karang comenzó a dar respuesta a la emergencia. Hasta el momento, se han distribuido 1.700 lotes de alimentos a los supervivientes de las áreas afectadas.
Un día después, en Nochebuena, la Cáritas de Bogor puso en marcha otro programa de respuesta humanitaria en cooperación con las parroquias de Kristus Raja, en Serang, y de Santa María Tak Bernoda, en Rangkas Bitung. Además, la Cáritas local está trabajando conjuntamente con el Hospital de la Misión de Lebak, perteneciente a las Hermanas Franciscanas, para proporcionar alimentos y asistencia médica las víctimas.
El plan de respuesta de Cáritas Bogor está siendo apoyado por la Arquidiócesis de Yakarta a través de la organización católica Lembaga Daya Dharma (LDD), que ha desplazado a la zona a su equipo de respuesta de emergencia para apoyar las actividades e identificar las necesidades más urgentes de los supervivientes.
Asimismo, Karina (Cáritas Indonesia) ha enviado desde la capital un vehículo 4×4 para apoyar la actividad en el terreno del equipo de LDD, al tiempo que ha mostrado su disponibilidad a las Cáritas locales para que, cuando lo decidan, puedan acceder al fondo nacional de emergencia.
Las necesidades más urgentes en este momento son agua potable, medicinas, alimentos, comida infantil y tiendas de campaña. Hasta ahora, Caritas Tanjung Karang se está centrando en la distribución de alimentos a los damnificados, mientras que Cáritas Bogor definirá sus prioridades en breve una vez que haya evaluado cuáles son las necesidades más urgentes de las parroquias afectadas.
Cáritas Española ha puesto a disponibilidad de Cáritas Indonesia una partida de 100.000 euros para apoyar los planes de respuesta a esta emergencia, que se añadirá al que ya viene prestando a los damnificados por el tsunami que azotó las costas del norte de Sulawesi en septiembre pasado.