La emoción, el reconocimiento y la celebración del compromiso con la justicia y los derechos humanos, en especial con su defensa frente a los abusos que sufren en todo el mundo cada día personas migrantes y refugiadas, han sido las notas dominantes en la gala de entrega de la II Edición de los Premios Cooperación Comunitat Valenciana -organizada por la Coordinadora Valenciana de ONGD, con la colaboración de Caixa Popular-, celebrada anoche en el Cubo Azul de la Universitat Politècnica de València.
El sacerdote, cooperante y activista por los derechos de las personas migrantes Alberto Guerrero, los periodistas Yolanda Álvarez y Germán Caballero, y las campañas “La Ventanilla Indiscreta” de Jovesolides y “CIEs no, por el cierre de los Centros de Internamiento de Extranjeros” recibieron sus galardones ante más de un centenar de representantes de ONGD, universidades, entidades sociales y sindicatos, entre las que se encontraba la consellera de Participación, Transparencia, Cooperación y Calidad Democrática, Rosa Pérez Garijo.
En la apertura del acto, la presidenta de la Coordinadora Valenciana de ONGD, Cristina Ramón, ha recordado las décadas de trabajo de esa organización, que el próximo año celebrará su 30 aniversario, en la denuncia violaciones de los derechos humanos y en la reivindicación de la justicia y transparencia. “Hemos aprendido a crecer fuertes en la diversidad, somos 101 organizaciones ideológicamente muy distintas pero tenemos claro que el objetivo común es remover conciencias. La pobreza no es un problema de carestía sino que es una injusticia, y la cooperación que hoy celebramos no habla de ayuda sino de defensa y ejercicio de los derechos humanos, de fraternidad y sororidad”, ha explicado.
Los premiados
Por el escenario del Cubo Azul ha pasado en primer lugar el sacerdote, sindicalista y activista Alberto Guerrero, reconocido por el jurado de los premios “por su defensa histórica de la cooperación”. Guerrero acumula una trayectoria de más de 50 años como cooperante, profesor, educador, impulsor y colaborador de muchas organizaciones y ONGD, en lugares como Burundi, Nicaragua, México, Albania, Ecuador y Marruecos, en la mayor parte de los casos acompañando a personas refugiadas que huían de conflictos y migrantes que huían de la pobreza. En la actualidad, sigue colaborando en València como voluntario y activista en defensa de los derechos de las personas migrantes y de las empleadas del hogar.
“Desde 1970 he trabajado con organizaciones de base en luchas sindicales, contra la pobreza, en situaciones de guerra. Creo que debemos sembrar esperanza para que la injusticia y la opresión no tengan la última palabra”, ha declarado Guerrero.
Periodismo que transforma
La reportera Yolanda Álvarez ha agradecido desde Pekín, donde en la actualidad ejerce como corresponsal de TVE, un premio obtenido por su trabajo “Náufragos sin tierra”, basado en la cobertura informativa que hizo durante el verano de 2019 a bordo del barco de rescate Open Arms en el Mediterráneo.
“Estar en el Open Arms en un momento en el que se estaba criminalizando a las ONG de rescate de seres humanos en cumplimiento del derecho internacional, es una forma de demostrar que el periodismo puede ayudar a hacer justicia. Dedico el premio a las personas rescatadas, que tuvieron la generosidad de desnudar sus almas para relatar sus historias de sufrimiento, abusos sexuales, torturas y esclavitud. Éste es un drama que sigue ocurriendo cada día en todas partes del mundo, y los medios deben estar en los lugares donde están ocurriendo las cosas porque hay realidades que quedan invisibles a los ojos de la gente si no hay periodistas haciendo su trabajo para visibilizarlas.”, ha explicado en su vídeo de agradecimiento.
Germán Caballero, por su parte, recogió el premio al “Periodismo joven comprometido”, por su reportaje “Baloncesto para romper fronteras y esquemas”, que cuenta la historia de un pionero equipo de baloncesto femenino en los camps de personas refugiadas palestinas en Líbano, que relata las desigualdades y las vulneraciones de los derechos humanos básicos que sufren estas personas, y aborda la importancia de la cooperación internacional para la generación de condiciones de vida dignas.
Caballero quiso recordar la situación de estas personas que “han nacido como refugiadas, viven como refugiadas y, si no se remedia, morirán como refugiadas” como una “injusticia que dura 70 años ante el vergonzoso silencio de la comunidad internacional”. También recordó la precariedad en la que vive la juventud en España y en particular la precariedad del fotoperiodismo, esencial para visibilizar estas situaciones. “No puede ser cuestión de voluntarismo, los medios de comunicación, las ONGD y las instituciones deben apostar e invertir en él”.
Campañas
Por último, en la categoría de “Campañas de redes, plataformas o movimientos sociales valencianos, han resultado premiados ex aequo las campañas “La ventanilla indiscreta”, de la ONG Jovesolides, por su innovación con la incorporación de experimentos sociales sobre temáticas como la igualdad de género y el trabajo decente; y la campaña “CIEs No” que reivindica desde hace más de 10 años el cierre de los Centros de Internamiento de Extranjeros.
“Buscamos soluciones a problemas complejos, y ponemos en ello el alma y el cuerpo para generar una tormenta perfecta. Con #LaVentanillaIndiscreta hemos cabalgado hacia un lugar incierto de manera imaginativa para tratar de hacer de este un mundo mejor”, ha explicado Lourdes Mirón, presidenta de Jovesolides.
La representante de la Campaña CIEsNo Crsitina Martínez recordó, por su parte, que seguirán exigiendo que dejen de existir “unas cárceles racistas que encierran a personas por ser migrantes y no tener un papel. A una falta que se debería solventar con una multa se le impone el peor castigo que existe en nuestro sistema penal: la privación de libertad. No nos cansamos de decirlo: la principal violación de los derechos humanos que se comete en los CIEs es su mera existencia”.
Soluciones comunes
Tras los premiados, intervino en el acto Paco Alós, director del área de Responsabilidad social y sostenibilidad de Caixa Popular, entidad que colabora con la Coordinadora en estos premios. Alós quiso “reconocer a un sector que, frente al individualismo, aporta soluciones comunes a la exclusión; frente al miedo al otro, aporta diálogo; y frente al conformismo y a un modelo económico depredador del medio ambiente y que genera injusticia, apuesta por los seres humanos”.
En la clausura, la consellera Rosa Pérez Garijo, señaló que “tenemos como gran desafío el cambio de las políticas públicas y hasta de nuestro modo de vida” para poder poner fin a la pobreza y respetar plenamente los derechos humanos.
El acto, dinamizado por las actrices Isabel Martí y Rocío Ladrón de Guevara, contó con la actuación de Spinish Circus, y la colaboración de la Universitat Politècnica de València y PROAVA Productos de Calidad Comunidad Valenciana.