La Coordinadora de ONG para el Desarrollo llama a continuar trabajando para dar respuesta de manera colectiva a la situación de emergencia en Ecuador

No olvidemos Ecuador. Urgimos al Gobierno de España a que atienda el llamamiento humanitario que han lanzado Naciones Unidas y el Gobierno de Ecuador

Fuente: Coordinadora de ONGD España

La Coordinadora de ONG para el Desarrollo llama a continuar trabajando para dar respuesta de manera colectiva a la situación de emergencia en Ecuador. Urgimos al Gobierno de España a que atienda el llamamiento humanitario que han lanzado Naciones Unidas y el Gobierno de Ecuador.

  • Dos semanas después del terremoto de 7,8 grados que golpeó Ecuador, se han producido múltiples réplicas, seis de ellas con magnitud superior a 6 grados. Decenas de miles de personas viven una grave situación de emergencia humanitaria
  • La Secretaría de Gestión de Riesgos de Ecuador sitúa enmás de 22.700 las personas que han tenido que ser acogidas en albergues
  • Las Naciones Unidas y el Gobierno de Ecuador han lanzado unllamamiento humanitariourgente a la comunidad internacional de72,7 millones de dólarespara atender a unas 350.000 personas durante los próximos tres meses
  • A pesar del enorme impacto del seísmo y de tratarse de uno de los diez más letales que ha afectado a América Latina,la emergencia ha perdido interés en la actualidad informativa
  • Mostramos nuestrasolidaridad con las víctimas del terremoto, con el país y con la comunidad ecuatoriana en España.

3 de mayo de 2016. Los retos humanitarios que enfrenta Ecuador son enormes. 17 días después de que el terremoto golpeara la zona norte del país, las informaciones oficiales sitúan en660 las personas fallecidasy en4.600 las heridas.

En este momento, el abastecimiento de víveres, agua, ropa, medicamentos y apoyo psicosocial es urgente. Existen problemas de abastecimiento de productos de primera necesidad. La atención sanitaria es una de las principales prioridades para frenar el posible brote de infecciones y epidemias. Las infraestructuras de la región están muy dañadas: carreteras y puentes han sufrido un gran impacto y los hospitales están desbordados. La recuperación de la zona exigirá labores de reconstrucción a muy largo plazo.

Colectivos vulnerables

Con más de 150.000 niños y niñas afectadas, la protección de la infancia es una de los aspectos más preocupantes. Este colectivo, junto a otros como las mujeres y las personas mayores o con discapacidad, tiene necesidades diferenciadas cuando se produce una emergencia que la mayoría de las veces no se tienen en cuenta. Las organizaciones que trabajan sobre el terreno están reportando casos de abusos sexuales a mujeres y situaciones de desamparo de niños y niñas. Con 281 escuelas afectadas, el derecho a la educación está en grave riesgo. La situación a la que se enfrentan estos colectivos es de extrema preocupación. Demandamos que se resuelvan urgentemente estos problemas y se dé respuesta inmediata a las necesidades específicas de estos colectivos.

Respuesta humanitaria

Existen cuestiones críticas, como la atención en las zonas rurales o la situación de servicios esenciales como el sistema de salud o la distribución de agua y alimentos, que deben ser atendidas de manera inmediata. Las Naciones Unidas y el Gobierno de Ecuador han lanzado un llamamiento humanitario urgente a la comunidad internacional de 72,7 millones de dólares para atender a unas 350.000 personas durante los próximos tres meses. Apelamos a la responsabilidad de los gobiernos donantes, especialmente al español, para que cubran estas necesidades financieras.

Queremos reconocer el importante papel que ha jugado el personal de la AECID en la emergencia, especialmente aquel que ha operado en la Oficina Técnica de Cooperación en Ecuador. Una vez más, el equipo humano de la cooperación española está muy por encima de los responsables políticos, ya que los enormes recortes sufridos por los fondos destinados a la ayuda humanitaria –con una reducción del 90% en los últimos años- hacen muy difícil una respuesta de calidad a las emergencias.

Ausencia en los titulares

A pesar de la gravedad de la situación, la atención mediática parece haber disminuido notablemente en los últimos días y, con ella, el conocimiento público sobre lo que está ocurriendo en la zona. Sin ese conocimiento público, también disminuye la presión ciudadana sobre las responsabilidades políticas ante situaciones de este tipo. La información sobre emergencias humanitarias que afectan a miles de personas debería ser una máxima de la labor periodística, especialmente de los medios públicos cuya función social forma parte de su ADN.

Por tanto, llamamos a realizar un ejercicio de responsabilidad colectiva que incluya a las instancias políticas competentes, a los medios de comunicación, a las ONG presentes en la zona y a la ciudadanía en general para que cada quien asuma sus responsabilidades y responda con compromiso y responsabilidad a los retos que plantea esta emergencia humanitaria.

Scroll al inicio